La capital de España, todo un referente turístico en cuanto a cultura, arquitectura, gastronomía y arte, puede ser visitada desde muchas perspectivas. Para aquellos que planean su viaje, existe una completa guía de qué ver en Madrid que les ayudará a organizar su estancia. Una de las zonas más emblemáticas es el Madrid de los Austrias.
No existe una delimitación geográfica precisa para el Madrid de los Austrias. Se trata del coloquialmente conocido como el Barrio de los Austrias, situado en el distrito central de Madrid, y que viene a suponer el trazado medieval más la expansión urbanística que se dio bajo los reinados de la Casa de los Austrias, desde Carlos I hasta Carlos II, pasado por Felipe II y Felipe III.
Forman parte del Madrid de los Austrias plazas archiconocidas como la Plaza Mayor o la Plaza del Sol, edificios emblemáticos como el Palacio Real o el Mercado de San Miguel, o calles tan reconocibles como la calle Mayor o la carrera de San Francisco. Para no perderte ningún rincón, puedes consultar el mapa turístico de Madrid que te ayudará a orientarte mejor.
Si dispones de 2 días en Madrid, podrás comenzar tu recorrido por el Teatro Real, y tras visitar el Palacio Real y la Catedral de la Almudena, dirigirte a la Plaza Mayor con su estatua de Felipe III destacando en el centro de la misma. Para aquellos que viajan en familia, existe una fantástica guía de qué ver en Madrid con niños que incluye actividades adaptadas para los más pequeños.
No muy lejos de aquí se encuentra el Mercado de San Miguel, antiguo mercado que ha sido restaurado y ahora es un sitio de moda, punto de encuentro de gourmets ávidos de buenos vinos y manjares, para tomar un aperitivo, comer o cenar. Si tienes la suerte de poder quedarte 3 días en Madrid, podrás explorar con más calma estos rincones gastronómicos.
Durante la época navideña, Madrid se transforma en un espectáculo de luces y color, y puedes descubrir todas las actividades especiales consultando la guía de Madrid en Navidad. Sin embargo, recorriendo solamente los espacios y disfrutando de los edificios renacentistas y barrocos que te encontrarás paseando, te perderás muchos pequeños detalles de gran importancia.
Como las placas cerámicas de las calles de Madrid, que desvelan muchas pistas del pasado histórico de los lugares en los que te las encuentras; las placas de bronce, que son placas conmemorativas entregadas por el Ayuntamiento de Madrid en 2007 y que reconocen a comercios centenarios; o los mentideros, las gradas del convento de San Felipe el Real, lugar donde los madrileños se reunían antaño para conversar y chismorrear.
Siendo una zona tan céntrica e importante además del entorno histórico y arquitectónico podrás disfrutar de la amplia oferta gastronómica del barrio, con espacios tan diversos como el ya citado Mercado de San Miguel, la Taberna del Capitán Alatriste, AskuaBarra o la Gastro de Chema.