¿Qué ver en Viena?
Viena, capital de Austria, es una de las ciudades con mayor encanto del centro de Europa siendo la segunda más poblada, después de Berlín. Atravesada por el río Danubio que recorre sus principales calles, se ubica en la parte más oriental del país en la zona del valle de los Bosques de Viena, a los pies de donde empiezan a erigirse las imponentes montañas de Los Alpes. Guarda un legado cultural y artístico único, teniendo como principales referencias a Mozart, Beethoven o el propio Sigmund Freud. A nivel arquitectónico destaca por sus imponentes palacios imperiales, sobre todo el de Schönbrunn, que actúa como residencia estival de los Habsburgo. En el distrito Museumsquartier se pueden admirar obras de artistas tan reputados como Egon Schiele o Gustav Klimt.
Si quieres conocer en profundidad la capital austriaca, es muy aconsejable hacerlo junto a un guía local oficial en alguno de los free tour en Viena. Podrás descubrir no solo los lugares imprescindibles, sino también su historia y todas las curiosidades que hacen de cada rincón una apasionante aventura. Los rutas que recorren el centro histórico pasan por sitios como el Palacio de Schönbrunn, el Palacio imperial de Hofburg o la Catedral de Viena. Sin olvidarnos de otros puntos de interés que también merece la pena visitar como son el Palacio Belvedere, la Ópera Estatal, el Museo de Historia del Arte, el Prater, el Museo Albertina, el Zoológico de Schönbrunn, el Museumsquartier, el Parlamento de Austria, la avenida de Ringstrasse, la Iglesia de San Carlos Borromeo o el Museo de Carruajes Imperiales. Si quieres conocer más en profundidad todo lo que ofrece esta ciudad, te dejamos la guía de viaje de Viena más completa con recomendaciones de guías locales expertos en la cultura vienesa.
En la mayoría de opiniones sobre los free walking tours en Viena se suele destacar la belleza de los recorridos, sea cual sea la temática de los mismo. Las visitas guiadas en esta ciudad del centro de Europa se pueden realizar en cualquier época del año, aunque en los meses más fríos hay que ir abrigados. Aprovecha también para probar la gastronomía austriaca así como los platos locales más típicos de la capital. El estilo de ciudad es similar al que puede tener Florencia, París o Roma.