Érase una vez, una niña soñó con emprender un largo viaje para descubrir lugares, culturas y artes que sus dos países le ofrecían. España y Marruecos. Durante el paso de los años, a medida que iba conociendo los rincones mágicos de ambos países, embelesaban más aun sus sentidos. Se formaba en Barcelona en el sector de Dirección Hotelera y Turismo, con los conceptos en mano y una diversidad de lenguas en el paladar, decidió iniciar su gran proyecto como guía en Marrakech. Cuánto más conocimiento recibía mayor eran las ganas de ofrecer a los visitantes su amada y querida tierra. Uno de los principales objetivos de dicho propósito era y es colaborar con familias nativas. De este modo logran la transformación social y laboral, empoderando la igualdad de derechos de hombres y mujeres. A través de una base tan estricta y real, nació Tours Aladdina Viajeros. Desde la libertad y el amor a las tierras que me han ofrecido sabiduría y carácter para enfrentar a las incómodas injusticias del nuevo siglo. Nuestra filosofía nace de ofrecer rutas privadas por el país a amigos, parejas y familias. Viajeros dispuestos a sentir la vida más salvaje, aventurera y recorrer Marruecos desde la autenticidad y diversión. Nuestro equipo de guías profesionales dominan el marroquí y un excelente nivel de español.
El equipo de Tours Aladdina Viajeros insistente en que nuestros exploradores del mundo aguarden un maravilloso recuerdo, mostrando sus mejores sonrisas al rememorar el sabor de las memorias de una estancia de emociones.
Molto piacevole
Ero l’unica partecipante al tour e, dopo poco, mi sembrava di passeggiare per le strade della Medina con un’amica del posto. Tra chiacchiere della vita a Marrakech, non solo dal punto di vista marocchino, ma soprattutto da quello femminile, ho scoperto aspetti nuovi e affascinanti della città, nonostante avessi già partecipato a un altro tour in precedenza. Soprattutto, Kamelia è riuscita a trasmettermi l’essenza e l’atmosfera unica che si respira a Marrakech vivendoci
Nefasta. Nos sentimos engañados. Nada que ver con la gastronomía marroquí. Era un paseo de noche por la plaza. El guía no hablaba español a pesar de ser lo que habíamos contratado y tampoco nos iba a explicar nada sobre comida típica. Mejor no perder el tiempo.
Nos dijo que eran 15€ por persona obligatorio. Decepcionante