Qué ver en Florencia

La fama de Florencia ha llegado hoy al mundo entero, y es que, desde la antigüedad clásica y el posterior Renacimiento, sus obras se han ido propagando por todo el planeta y nos han dejado un legado histórico y cultural inimitable. Si te preguntas qué ver y hacer en Florencia, debes saber que los rincones que puedes visitar son infinitos.

No obstante, te vamos a proponer una ruta de los lugares más representativos: Piazza del Duomo, Piazza de la Signora, Galería Uffizi, Galería de la Academia, Palazzo Vecchio, Ponte Vecchio, Catedral de Florencia, Santa Croce, Piazzale Michelangelo, Museo dell'Opera del Duomo, Museo Galileo, Santa María, Novella Campanile de Giotto, Jardines Boboli y el Museo Nazionale del Bargello.

Durante la ruta, podrás conocer la historia de Florencia y comprender cómo el arte italiano ha provocado un interés mundial en constante extensión. Firenze tiene una producción monumental muy sólida y constante, además de espectaculares obras, plazas, edificios y monumentos. La historia de la ciudad ha estado además siempre vinculada a las corrientes intelectuales y religiosas de cada época, manteniéndose el pasado como fuente de inspiración y como un recurso inagotable.

Florencia es la capital del arte. Más del 60 % de las obras de mayor importancia del mundo están en Italia y, de ellas, la mitad están en esta ciudad, de acuerdo con la UNESCO.

Estos son los lugares imprescindibles e imperdibles que visitar en Florencia, es posible que no puedas verlos todos, depende si visitas la ciudad, uno, dos o tres días. Se incluyen recomendaciones de guías locales para que no te dejes nada por ver y no pases por esta gran ciudad como un turista más.

Piazza del Duomo

La Piazza del Duomo es siempre un buen inicio para visitar Florencia. Crea una de las estampas más famosas de la ciudad gracias a la vista que se tiene desde ella a la Catedral, al Ponte Vecchio, al Battistero di San Giovanni y al Campanile de Giotto conjuntamente. La plaza es el centro civil de la ciudad, además del religioso y espiritual.

Los orígenes de esta preciosa plaza florentina se remontan al que fue el señor de Milán desde el año 1323 y que perduró como tal hasta el año 1339: Azzone Visconti. El señor de Milán ordenó que todas las iglesias centrales que tenía Milán en 1330, que eran dos (la Basílica de Santa Tecla y la Basílica de Santa Marta Mayor), fueran demolidas. De ese modo, en aquel lugar se podría crear la conocida "Piazza dell'Arengo". Esta fue una plaza del mercado que se constituyó como el primer atisbo de lo que hoy podemos conocer como la Plaza del Duomo.

La plaza se construyó por tanto en honor a este "broletto" o "arengario". Así, en sus inicios se constituyó como la sede del gobierno local. No obstante, por desgracia hoy en día no podemos visualizar allí ninguno de los que fueron los edificios originales de aquella plaza. La Piazza dell'Arengario, hoy Plaza del Duomo, ha sufrido numerosas modificaciones. Una de las más destacables es la que se llevó a cabo en el siglo XVIII, mucho tiempo después de su primera construcción.

En esta modificación a mitad del siglo XVIII, se rediseñó el ya obsoleto arengario. Ahora, este lugar se convertiría en Palacio Real de la mano del arquitecto Giuseppe Piermarini. Una de las mejores partes de esta modificación en lo referido a la arquitectura civil es que el arquitecto creó junto al Palacio Real una plaza más, que era un poco más pequeña. Al crearla en ese lugar, supuso que las dos plazas acabaran convirtiéndose en solo una, que, a partir de entonces, estaría ampliada al aire libre: la Plaza del Duomo.

La Piazza del Duomo es siempre un buen inicio para visitar Florencia. Crea una de las estampas más famosas de la ciudad gracias a la vista que se tiene desde ella a la Catedral, al Ponte Vecchio, al Battistero di San Giovanni y al Campanile de Giotto conjuntamente. La plaza es el centro civil de la ciudad, además del religioso y del espiritual.

Cada verano, cerca de casi todas las plazas hay siempre entretenimiento durante las noches florentinas, lo cual da lugar a un paisaje espectacular, pues Florencia está rodeada por todas partes de impresionantes edificios. Por temporadas, también podrás disfrutar de programaciones teatrales con eventos especiales como óperas, ballet, conciertos, espectáculos de personajes famosos, exhibiciones o exposiciones de arte.

El pequeño soportal de la plaza se construyó por la Compagnia della Misericordia de Florencia, una de las hermandades más antiguas de la ciudad, y allí se exponían los niños desamparados. Además, es aquí donde encontramos el Museo dell'Opera del Duomo, donde podrás visitar las esculturas originales que en la antigüedad solían adornar los edificios que ves en la plaza.

Piazza della Signoria

Es uno de los puntos más animados de la ciudad, pues durante todo el año, sobre todo en las noches de verano, actúan artistas locales en ella. Se encuentra entre la Piazza del Duomo y el río Arno. En ella solía haber una instalación termal durante el Imperio Romano. La forma actual la adoptó a mitad del siglo XIII y se pavimentó al final del XIV.

La historia de la plaza de la Señora procede de los romanos. Esta plaza ha tenido una gran serie de cambios desde su modificación. A veces, al ver rincones neurálgicos como este, vemos que Florencia ya poco tiene que ver con aquello, aun manteniendo siempre sus rasgos culturales. Se encuentra entre la Piazza del Duomo y el río Arno. En ella solía haber una instalación termal durante el Imperio Romano. La forma actual la adoptó a mitad del siglo XIII y se pavimentó al final del XIV.

Uno de los aspectos más relevantes de la plaza es su Fuente de Neptuno. Esta fuente fue la primera que se construyó como pública en la ciudad florentina. Se remonta nada menos que al 1565 y se encuentra frente por frente al Palacio Vecchio, otro de los puntos más relevantes de la ciudad. En la fuente, disfrutarás de las vistas a la estatua de mármol del dios Neptuno, que se alza majestuosa frente a nosotros. Cerca de ella verás otra de las grandes estatuas que hay en esta plaza, la dedicada a Cosme I, la cual fue realizada en 1594.

Galería Uffizi

La Galería de arte Uffizi es el museo más visitado de Florencia. En él se pueden apreciar cuadros como La Adoración de los Magos de Leonardo Da Vinci, o El Nacimiento de Venus de Botticelli. El edificio se comenzó a construir en el año 1560 por orden de Cosme I de Médici, sustituyendo la residencia del Palacio Vecchio. En 1581 terminaron las obras y fue cuando el edificio empezó a guardar las innumerables obras de arte que tenía la familia Medici.

Por eso el museo cuenta con una de las colecciones de pintura con más fama y riqueza del mundo. Al recorrer el museo se puede observar desde estatuas romanas y griegas, hasta estampas y dibujos, así como grandiosas pinturas.

La galería fue originalmente utilizada a modo de oficinas por los magistrados, técnicos y mercaderes de Florencia. Dentro, las salas están ordenadas de forma cronológica. Su estructura y museografía está pensada para que sea fácil de recorrer. En ella, destaca la parte del Renacimiento italiano que cuenta con obras de Botticelli, Rafael, Leonardo Da Vinci, Miguel Ángel o Tiziano.

Entre muchas de las obras de arte que acoge la Galería Uffizi son especialmente reconocidas las siguientes:

• El Nacimiento de Venus de Botticelli
• La Anunciación de Leonardo da Vinci
• La Virgen del Jilguero de Rafael
• Adoración de los Magos de Leonardo da Vinci
• La Venus de Urbino de Tiziano

Además, se exponen creaciones artísticas de maestros de la plástica y las artes decorativas, que son exhibidas en la Sala de Arte, dedicada a exposiciones temporales. Cuenta también con una sala de conciertos y un centro de formación artística donde se realizan diferentes actividades culturales.

Para la construcción de este edificio en forma de "U" se demolieron varias edificaciones, como la Iglesia de San Pier Scheraggio, una importante iglesia de estilo romanesco perteneciente al siglo XI. El proyecto de la iglesia pasó por algunos arquitectos, hasta que por fin la obra llegó a su fin. En la planta superior se montó una galería privada para la familia gobernante de Florencia y de sus invitados.

En esta parte del museo se guardaron tanto pinturas, como joyas, estatuas, armas, instrumentos científicos, y más. Se convirtió en su totalidad en las colecciones más interesantes y preciosas de todo el mundo.

En el año 1769 la Galería se hizo museo y abrió sus puertas oficialmente a todos sus visitantes. Actualmente contiene una de las más antiguas y famosas colecciones de arte del mundo, por lo que su visita es imprescindible que ver en Florencia.

Galería de la Academia

La Galería de la Academia es otro de los museos imprescindibles para visitar en la ciudad de Florencia. Este museo está dedicado a la escultura, a la pintura y a los instrumentos musicales. La Galería destaca por acoger en su interior una de las esculturas más famosas: El David de Miguel Ángel.

En la actualidad la Galería acoge no solo la escultura del David, sino también las cuatro estatuas de los esclavos o "Los Prisioneros", La Piedad y El San Mateo. Además, el museo guarda también una atractiva colección del arte florentino, como pinturas y esculturas del siglo XIII hasta el siglo XIX. Esta colección se fue ampliando con el paso del tiempo y por las donaciones provenientes de la supresión de algunas órdenes religiosas y con el cierre de iglesias y monasterios. En la Galería hay una sala dedicada a instrumentos musicales antiguos que alguna ocasión pertenecieron a la familia de los Medici y Lorena.

La Galería de la Academia es uno de los museos más visitados de Florencia y del mundo. Las obras de Miguel Ángel son las que sus turistas suelen visitar, como su gran obra maestra, El David. Sin embargo, hay otras 6 obras más del mismo artista. Los cuatro Prisioneros o Esclavos son cuatro esculturas que representan figuras masculinas esculpidas, las cuales no están totalmente terminadas y dan la impresión de que se encuentran atrapadas en un bloque de mármol tratando de salir de la piedra. Estas obras escultóricas están ubicadas en la Galería de los prisioneros de la Galería de la Academia, iniciando el corredor de entrada que nos lleva al David.

Entre los datos curiosos que rodean la obra maestra de Miguel Ángel, el bloque de mármol de donde salió el famoso David fue sacado de la cantera de Fantiscritti en carrara para después ser transportado a Florencia. El bloque pasó por diferentes manos antes de llegar a las de Miguel Ángel, por su altura de 5.50 metros fue llamado "el gigante". El artista Simone de Fiesole había arruinado el bloque tratando de tallarlo. Después, otros artistas lo intentaron pero no tuvieron éxito.

La escultura se hizo entre los años 1501 y 1504 en los talleres situados en la Opera del Duomo. Cuando fue terminada se trasladó a las puertas del Ponte Vecchio, donde está la Piazza della Signoria. Finalmente, la escultura volvió a manos de Miguel Ángel en 1501. Para protegerla del ambiente por estar al aire libre, la escultura fue trasladada a la Academia en 1873.

Palazzo Vecchio

El Palazzo Vecchio se encuentra en la Piazza della Signoria e impacta a todo visitante. Tiene forma de castillo y una torre de 94 metros. Este palacio es uno de los símbolos de Florencia y se construyó entre 1299 y 1314 para que residieran y trabajaran los funcionarios de la república. En su entrada hay dos grandes figuras: la copia del David de Miguel Ángel y al otro lado, Hércules y Caco de Bandinelli. El arte italiano ha provocado un interés mundial en constante extensión. Florencia tiene una producción monumental muy sólida y constante, además de espectaculares obras, plazas, edificios y monumentos.

El aspecto actual de Palazzo Vecchio se debe a una redecoración y reestructuración que se realizó durante el siglo XVI por orden de Cosimo I de Medici. La orden se debió a que quería convertir el edificio en su residencia, por lo que se convirtió en el Palacio Ducal durante un tiempo. Actualmente, acoge al Museo del Ragazzi, a la Sala del Cinquecento, donde se realizan audiencias especiales y algunos eventos importantes, como en su uso original, así como a las oficinas del Ayuntamiento.

Un dato que pocas personas conocen es que en el Palazzo Vecchio podemos encontrar unos pasadizos secretos. Estos pasadizos ocultos fueron construidos por la familia de los Medici para guardar allí los objetos de mayor valor y para escapar de sus enemigos en caso de que tuvieran que hacerlo. Un ejemplo de ello lo puedes ver en la Stanza delle Mappe. Allí está situado el mapa de Armenia, y si te fijas detrás de dicho mapa hay una entrada secreta que da lugar al vestidor de la segunda esposa de Francesco I: la duquesa Bianca Capello. Esto es solo un ejemplo, ¡puedes encontrar muchos más si pones atención!

Ponte Vecchio

Su estampa es muy representativa y tiene un enorme atractivo romántico y turístico. El puente se cree que fue construido por los romanos en el año 150 a.C. tras la fundación de la ciudad y que se amplió poco después para que atravesase la ciudad. Es un símbolo de amor también para parejas de todo el planeta. Este puente tuvo una gran importancia comercial y nos presenta dos terrazas panorámicas, en una se encuentra el monumento que Romanelli realizó a Benvenuto Cellini y en la otra está el corredor vasariano.

En Florencia, todas las crecidas del río Arno fueron destruyendo los puentes uno a uno. Sin embargo, cuando se reconstruyó el Ponte Vecchio en piedra, se consiguió que se mantuviera en pie hasta nuestros días. Aunque no es el hecho de la piedra en sí lo que lo ha conseguido, sino los arcos rebajados con los que se han construido. Hoy, este puente no tiene nada que temer a las riadas y crecidas, y es un símbolo fundamental de la urbe. Si vas a estar pocos días en la ciudad, te recomendamos que incluyas en tu recorrido este lugar, considerado un imprescindible por los expertos locales que hay que ver y visitar en Florencia en tu visita.

Catedral de Florencia (Duomo)

La Catedral de Santa María de Fiore, en Florencia, es de las mejores obras arquitectónicas del arte gótico del Renacimiento Italiano. Fue el símbolo de la riqueza y el poder de la capital toscana durante los siglos XIII y XIV. La forma particular su enorme cúpula, diseñada por Filippo Brunelleschi, sobresale a primera vista. En 1982, la catedral fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Por eso, no puede dejar de ser visitada si se recorre esta ciudad.

La Catedral de Santa María del Fiore se levantó en el mismo sitio donde estaba situada la Iglesia de Santa Reparata. Su edificación fue impulsada principalmente por la construcción de nuevas catedrales en las ciudades Pisa y Siena. Ya que además, esta era demasiado pequeña para cumplir las necesidades de la ciudad, que se encontraba en plena expansión.

Así que, a finales del siglo XIII, la antigua Iglesia de Santa Reparata que destacaba por sus nueve centurias fue derrumbada. Y la nueva catedral se comenzó a construir, una iglesia mucho más grande y adornada. La Catedral de Santa María del Fiore fue en su momento la catedral más grande de Europa. Su interior puede albergar a un total de 30.000 personas. Hoy en día las únicas iglesias que la superan en tamaño son: la Basílica de San Pedro en la Ciudad del Vaticano, la Catedral de Sevilla, la Catedral de San Pablo en Londres y la Catedral de Milán.

La catedral fue diseñada por el arquitecto Arnolfo di Cambio, quien pensaba construir la catedral más grande del mundo. Sin embargo, el diseño fue cambiando con el paso de los años durante su construcción, y finalmente terminó reduciendo su tamaño. Arnolfo es conocido también por diseñar el Palazzo Vecchio y la Basílica de la Santa Cruz.

La Catedral se tardó en construir 170 años, lo que supone un gran esfuerzo en el que se vieron implicadas varias generaciones. En 1302 el proyecto se detuvo 30 años durante su construcción cuando el arquitecto Arnolfo falleció. Sin embargo, volvió a la carga cuando descubrieron las reliquias de san Zenobio en la antigua iglesia de Santa Reparata en el año 1330.

Las capillas laterales de la Catedral de Santa María del Fiore y el ábside fueron construidas por Francesco Talenti, un añadido al diseño del fallecido arquitecto Arnolfo. Fue Talenti quien también terminó los trabajos del campanario. Después, en 1359 le sucedió el arquitecto Giovanni di Lapo Ghini. Fue él quien seccionó la nave central en cuatro. Por otro lado, otros arquitectos que participaron en su construcción fueron Giovanni d'Ambrogio, Alberto Arnoldi y Neri di Fioravante y Orcagna.

La Cripta de la Catedral de Santa María del Fiore se creó entre los años 1965 y 1974. Estas bóvedas se utilizaron para sepultar obispos florentinos. Pero además, se encontraron varias ruinas, entre ellas un pavimento del cristianismo temprano y casas romanas. Sin olvidar los restos de la antigua Iglesia de Santa Reparata. En la cripta también se encuentra sepultado Brunelleschi, tumba que pueden visitar todos aquellos turistas que lo deseen.

Santa Croce

Se trata de la Iglesia franciscana más grande del mundo, es un verdadero panteón de Florencia y tiene cerca de 300 tumbas, entre ellas, las de Galileo y las de Miguel Ángel. Se comenzó a construir en 1294, donde años antes se conmemoró la muerte de San Francisco de Asís. En las capillas podrás disfrutar de frescos de artistas como Donatello, Giotto o Brunelleschi.

En el lugar donde se encuentra construida, anteriormente se construyó una capilla cuya finalidad principal fue conmemorar a San Francisco de Asís tras su muerte. La Iglesia de Santa Croce supuso un hito muy importante en Florencia, pues una vez construida, se comenzó a prestar menos atención a la Iglesia de Santa María Novella y Santa Croce acaparó un mayor protagonismo. El interior de la Iglesia, en muchas ocasiones, podría parecer que no llama tanto la atención. Sin embargo, su protagonismo se debe a que contiene pinturas, así como esculturas, de un valor incalculable.

Piazzale Michelangelo

La Plaza de Miguel Ángel es uno de los mejores miradores de Florencia. En la plaza podrás encontrar restaurantes, cafeterías y ambientes animados a la vez que ves una réplica del David de Miguel Ángel en bronce. En el año 1869 se fue construida mediante el uso de los planos de G. Poggi y generó una ola de innovación en la ciudad. La plaza, tal como su nombre indica, se dedica a uno de los artistas renacentistas más importantes de todos los tiempos: Miguel Ángel.

Además de la réplica de su obra David, se contienen allí las cuatro alegorías de Cappelle Medicee de San Lorenzo. Su logia neoclásica, que es hoy un restaurante panorámico, se construyó para realizar un museo con las obras de Miguel Ángel, pero nunca llegó a construirse. Desde la plaza, podrás ver unas fantásticas vistas al casco histórico de la ciudad, pasando por el Forte Belvedere hasta Santa Croce, por el Duomo, por el Ponte Vecchio, por el Palazzo Vecchio, por el Bargello, etc.

Museo dell'Opera del Duomo

El museo dell'Opera del Duomo cuenta con bocetos originales y con herramientas utilizadas cuando se construyó la Catedral. Se encuentra situado detrás de la cúpula de la Catedral, en un antiguo palacio. En dicho palacio trabajaron artistas como Brunelleschi o Donatello. Igualmente, la Ópera del Duomo también fue el lugar en el que Miguel Ángel elaboró otra de sus famosas obras: la de David.

En el interior se guardaban muchas de las piezas originales y de las esculturas que, posteriormente, por motivos de conservación, se sustituyeron por copias en el Campanile, en la Catedral y en el Battistero. En el interior del museo, a su vez, verás algunas de las obras de construcciones originales y maquetas diferentes de la cúpula de la catedral y de su fachada.

Museo Galileo

Es uno de los museos más importantes del mundo en su área y contiene objetos tan valiosos como por ejemplo, el primer telescopio de Galileo. Este museo también recibe el nombre de Museo de Historia de la Ciencia y cuenta con toda clase de instrumentos científicos y de importantes herramientas desde el renacimiento hasta el siglo XX. Otro de los más importantes objetos contenidos en el museo es el primer barómetro de mercurio, que se inventó en el 1634.

Los objetos más antiguos que se contienen en él provienen de las familias Lorraine y Medici. Entre los distintos objetos mencionados, podrás encontrar algunos astronómicos, otros de navegación, artilugios matemáticos, otros quirúrgicos y también algunos ópticos. A su vez, hay una colección pequeña de relojes de bolsillo entre los que podrás ver algunos de incluso finales del siglo XVI.

Santa María Novella

Para viajar a Florencia, siempre tenemos como eje lugares como Santa María, un eje imprescindible en tu visita turística a la ciudad. Se trata de una de las grandes obras maestras del primer Renacimiento italiano y del arte gótico. La catedral es un símbolo del poder de la ciudad, además de su riqueza. Durante los siglos XIII y XIV fue además uno de los más grandes de la cristiandad. Además, la basílica es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 1982, junto con el Centro histórico de Florencia.

La catedral se levantó en el espacio de la antigua Iglesia de Santa Reparata. Al final del siglo XIII, la Iglesia previa se derrumbaba, y los habitantes querían un lugar grandioso. Así, cuando terminó de construirse fue la de mayor tamaño de Europa, con capacidad para albergar 30.000 personas. Actualmente son pocas catedrales las que la superan.

Campanile di Giotto

La Novella Campanile de Giotto se construyó en el siglo XIV por Andrea Pissano y por Gioto. Se trata del campanario de la Catedral de Florencia, famoso por ser esbelto y por estar considerado como uno de los más bellos de toda Italia. En parte, esta fama se debe a sus proporciones meticulosamente cuidadas y a su colorido armonioso. La torre cuenta con un revestimiento blanco de mármol, similar al de la catedral, es decir, de colores verdes y rojos.

La construcción de este campanario empezó siguiendo los planos de Giotto en 1334, el cual, no pudo finalmente ver su obra acabada. Una vez fallecido, Andrea Pisano continuó con la construcción, que acabó en el 1359. Las estatuas del campanario son réplicas. No obstante, en el Museo dell'Opera del Duomo puedes ver las originales.

El campanario contiene nada menos que 414 escalones, pero una vez que llegas a los 84 metros de altura, el esfuerzo se ve recompensado ante una de las vistas más bellas de la ciudad.

Jardines Boboli

Se encuentran situados detrás del Palacio Pitti. Los Jardines de Boboli tienen 45.000 metros cuadrados y constituyen la zona verde de mayor tamaño de toda Florencia. La historia de los jardines comenzó en el año 1550, cuando la familia Medici realizó la compra del Palazzo Pitti. En sus inicios, el parque tan solo abarcaba la zona que se encuentra entre el Forte di Belvedere y el palacio, pero en el siglo XVII se extendió al suroeste. En el año 1766 fueron por primera vez abiertos al público.

En los jardines podrás ver pérgolas, un pequeño lago, cientos de estatuas de mármol, pérgolas y mucho más. Te recomendados que le dediques entre 2 y 3 horas si quieres recorrer los jardines por completo y sin ninguna prisa. Uno de los lugares más relevantes del jardín es el del antiguo anfiteatro. En el centro del mismo se encuentra un obelisco egipcio que se llevó desde la Villa Medici en Roma.

Museo Nazionale del Bargello

El Museo Bargello se comenzó a construir en el año 1255 y cuenta con la mayor colección de esculturas procedentes de Italia de entre los siglos XIV al XVI. Al llegar, el edificio ya es impactante de por sí, pero además, en su interior también cuenta con armaduras, armas y medallas de la familia de los Medicis, así como con otros trabajos de marfil y de bronce. La estructura del edificio nos recuerda a la de un castillo. A veces, en este museo se llevan a cabo exposiciones temporales.

Tras un siglo entero de reparaciones, de obras y de destrozos, en el siglo XIV adoptó el aspecto que tiene hoy. Fue en 1865 cuando el museo abrió sus puertas exhibiendo finalmente obras como el Baco ebrio de Miguel Ángel o el David de Donatello. Florencia recibe cada año en este lugar a numerosos viajeros de todo el mundo. La ciudad es un centro de cultura y de arte que se mantiene activo durante todo el año y uno de los puntos fundamentales es el Museo Bargello.

Qué hacer en Florencia

Si vas a visitar Florencia, te sorprenderá su mezcla de cultura y de arte, lo cual permite que siempre tengas algo nuevo que puedes ver y hacer o experimentar en la ciudad. Las oportunidades que te ofrece la ciudad son inagotables, por lo que siempre estarás en contacto con la arquitectura, con la literatura, con el arte, con las obras culturales de Italia, así como con sus lugares imprescindibles.

Cada verano, cerca de las plazas hay siempre entretenimiento durante las noches florentinas, lo cual da lugar a un paisaje espectacular, pues Florencia está rodeada por todas partes de impresionantes edificios. Por temporadas, también hay programaciones teatrales con eventos especiales como óperas, ballets, conciertos, espectáculos de personajes famosos, exhibiciones o exposiciones de arte.

Historia de Florencia

Florencia es una ciudad que emerge a orillas del río Arno con un sinfín de lugares imprescindibles. Es una fuente de historia y de cultura que irradió durante varios siglos al planeta entero con su belleza y el arte que en ella vive, y así continúa a día de hoy. La historia temprana de Florencia nos cuenta que empezó como un lugar de asentamiento al que llegaban en el año 59 a. C. los soldados de Julio César.

Más tarde, llegó a la ciudad la época del Renacimiento, que se dio entre los siglos XIV y XVI y que empezó a partir de un movimiento cultural que se generó impulsado por el dinero. Las figuras más predominantes y ricas de la ciudad comenzaron a patrocinar a artistas como Miguel Ángel y contribuyeron a que se desarrollara la cultura humanista. Actualmente, esta ciudad nos deja trabajos de gran valor de la talla de personajes como Boccaccio, Galileo Galilei o Petrarca.

Preguntas Frecuentes sobre Florencia